Hoy en día y de forma gradual hemos generado conciencia sobre la importancia que tiene el alimentarnos de forma saludable. Sabemos que las enfermedades como obesidad, hipertensión y diabetes están cada vez más a la alza, es por eso que muchas personas responsables del hogar, queremos ofrecerle a nuestra familia alimentos saludables y a la vez deliciosos, que brinden suficiente energía a nuestros hijos para el rendimiento escolar y no está de más protegernos de enfermedades transitorias derivadas del mal clima, elevando nuestras defensas de forma autónoma con ayuda de los alimentos.
Y es que nos hemos creado un sinónimo en la cabeza de que comer rico y saludable es lo mismo a comer caro, porque creemos que entre más caro, más orgánico, más light, y más sugar free, alcanzaremos el concepto de "Healthy", y viéndolo desde esa perspectiva por supuesto que suena complicado, laborioso pero sobre todo caro, ya que son prácticas que nos invita a poner en tendencia nuestra alacena con los famosos "super foods" que si bien es cierto que nos aportan beneficios a la salud, es una gran mentira que el uso exclusivo de estos alimentos nos mantendrán saludable.
Por eso me decidí a escribir este post, quiero ampliar tu panorama, darte algunas herramientas para que tu hogar se alimenten de forma correcta sin descuidar de la economía familiar, ¡Alimentarse de forma saludable y equilibrada con alimentos accesibles es posible! Por que es de ley que quien no tenga tiempo ni recursos para hoy cuidar de su salud, mañana tendrá que hacerse de tiempo y de recursos para cuidar de su enfermedad así que como diría mi abuela "No queremos que salga más caro el caldo que las albóndigas" ahora presta atención que el día de hoy te daré algunos consejos para mejorar tu alimentación sin gastar tanto.
1. Elimina los gastos hormiga: Con esto me refiero a que elimines aquellos "pequeños" gastos, en cosas no necesarias como: galletas, refrescos, botana... étc (Cada quién conoce sus pecados) esto con la finalidad de ver reflejado un ahorro que te permita adquirir alimentos con un mejor aporte nutrimental, porque haz cuentas si gastas en refresco diario para acompañar la comida pero compras el chiquito de $7.00 para que salga mas barato, a la semana estarías gastando $35.00 y eso considerando que solo lo compras en días laborales, si eso lo multiplicas por las 4 semanas del mes serían $140.00 que estarías ahorrando, y podrás decir "Ay $140.00 no son nada" pero ponte a pensar, si además del "refresquito" diario le sumas los días que decidiste comer fuera de casa porque "por las prisas" no te dio tiempo de preparar en casa algo para desayunar, más los chicles para tener el aliento fresco regresando de comer a la oficina, más el café venti, más el "cigarrito" que fumas durante el break, más más más más. ¿Te das cuenta? Estos gastos hormiga, que en definitiva no traen beneficios a la salud, representan un gasto innecesario pero sobre todo con ese dinero podrías comprar alimentos de mejor calidad.
2. Evita comprar alimentos por tendencia: algunas veces y con el afán tener en a la moda nuestra alacena, caemos en el juego de comprar cosas que no son del todo necesarias como las nuevas semillas "X" con un "poderoso poder antioxidante" o la bebida energética que además te dará "el shot de vitaminas que necesitas al día" o el queso "libre de lactosa y con 0.001% de grasa". Todos estos son ejemplos burdos, pero realmente llegamos a caer en el consumo por la buena mercadotecnia que hay detrás, así que no te dejes llevar tan fácil. Un comprador informado es un consumidor responsable.
3. Evita hacer las compras con hambre: Ya sea que vayas al super o al mercado, evita a toda costa hacer tus compras sin una planificación de lo que vas a comer en el transcurso de la semana, quincena o mes (Como sea que anticipes tus compras) pero sobre todo evita ir con hambre. Verás, es muy común comprar alimentos por antojo que realmente por necesidad, y no es que esté mal llevar el antojito de vez en cuando, pero si esto ya es parte de un modo de vida entonces ¡Alerta!
4. Busca el equilibrio en tu plato: Sí, ya sabemos que debemos consumir frutas y verduras día a día, pero las cantidades son muy importantes. Basándonos en el plato del buen comer, que por cierto es una guía básica y orientativa. Podremos notar que la imagen asemeja el cómo se debe ver mi plato a la hora de sentarme a comer. Y es aquí donde implicará un ahorro importante, ya que la mitad del plato está constituida por frutas y verduras, las cuales además de ser muy económicas y más si se trata de las de temporada, son una excelente fuente de energía, vitaminas, fibra y minerales los cuales necesitamos para gozar de buena salud. 1/4 parte del plato debe ser de cereales puede ser pasta, arroz, tortilla e incluso bolillo, estos ademas de ser cereales de un bajo costo, nos van a aportar fibra, ácido fólico y vitaminas del complejo B. En la última cuarta parte del plato se encuentra la proteína, es decir todos los alimentos de origen animal; pollo, pescado, cerdo, etc. Y no, no se necesita comer salmón todos los días para estar saludables, existen alternativas muy asequibles para todos los bolsillos, en los más económicos encontramos el cerdo y el pollo que son proteínas de alto valor nutrimental. Pero si de plano ni con esas porciones, tu economía no da para comprar carne, no te preocupes ya que combinar un cereal (arroz, pasta, tortilla, bolillo, etc) con una leguminosa (habas, lentejas, garbanzos, frijoles, etc) da como resultado una proteína de alto valor muy similar a la de la carne.
5. No necesitas consumir azúcar: Sí, es cierto que el principal alimento del cuerpo es la glucosa, esto se debe a que nos aporta energía, sin embargo no necesitas consumirla en forma de azúcar ya que la puedes encontrar de forma natural en las frutas. El azúcar de mesa, llámese "miel de abeja, azúcar blanca, morena, de mascabado, refinada, etc" solo aporta calorías, la única variante entre ellas es la cantidad de fibra que ofrece mientras que la fruta, aporta azúcar en forma de fructosa además de fibra, vitaminas, minerales y hasta agua. Hemos acostumbrado el paladar al sabor dulce en nuestros alimentos y bebidas, y dejarlo no siempre es fácil, así que puedes ayudarte en la transición de bajarle al azúcar de endulzantes no calóricos. Bajarle al azúcar de mesa implica también un ahorro.
6. Prepara tus alimentos en casa: Independientemente del tema de higiene y seguridad en la preparación, también implica un ahorro significativo tanto económico como de calorías, ya que por muy barata que sea la fonda (que es el lugar más frecuente de consumo fuera de casa) siempre será más costoso que llevarte tus alimentos desde casa. Resaltemos que al final del día la fonda es un negocio que necesita ahorrar en la medida de lo posible, y esto puede ser, desde comprar alimentos de baja calidad, re utilizar alimentos o ingredientes que no se terminaron, reciclar el aceite y servir lo mismo (nutrimentalmente hablando) para saciar a sus comensales y sí, me refiero a los primeros tiempos de comida en los que es muy común servir arroz más pasta, más tortillas. Pero no quedan de lado las aguas y los postres, porque si bien nos va, pueden ofrecernos agua de frutas naturales y fruta fresca de postre, pero si no, se ofrece refresco, agua con saborizantes artificiales y un postre por de más azucarado. Sí es más fácil acudir al puesto, a la fonda, al restaurante y quizás hasta más rico, sin embargo comer de forma saludable solo implica planeación y organización.
Te invito a llevar un mejor estilo de vida, adoptando hábitos que mejoren tu salud.
No dejes para mañana lo que puedes empezar hoy.
Yo soy Narshelli Lozano, tu nutrióloga de cabecera y nos leemos en el siguiente post con más información para cuidar tu salud.
Y es que nos hemos creado un sinónimo en la cabeza de que comer rico y saludable es lo mismo a comer caro, porque creemos que entre más caro, más orgánico, más light, y más sugar free, alcanzaremos el concepto de "Healthy", y viéndolo desde esa perspectiva por supuesto que suena complicado, laborioso pero sobre todo caro, ya que son prácticas que nos invita a poner en tendencia nuestra alacena con los famosos "super foods" que si bien es cierto que nos aportan beneficios a la salud, es una gran mentira que el uso exclusivo de estos alimentos nos mantendrán saludable.
Por eso me decidí a escribir este post, quiero ampliar tu panorama, darte algunas herramientas para que tu hogar se alimenten de forma correcta sin descuidar de la economía familiar, ¡Alimentarse de forma saludable y equilibrada con alimentos accesibles es posible! Por que es de ley que quien no tenga tiempo ni recursos para hoy cuidar de su salud, mañana tendrá que hacerse de tiempo y de recursos para cuidar de su enfermedad así que como diría mi abuela "No queremos que salga más caro el caldo que las albóndigas" ahora presta atención que el día de hoy te daré algunos consejos para mejorar tu alimentación sin gastar tanto.
1. Elimina los gastos hormiga: Con esto me refiero a que elimines aquellos "pequeños" gastos, en cosas no necesarias como: galletas, refrescos, botana... étc (Cada quién conoce sus pecados) esto con la finalidad de ver reflejado un ahorro que te permita adquirir alimentos con un mejor aporte nutrimental, porque haz cuentas si gastas en refresco diario para acompañar la comida pero compras el chiquito de $7.00 para que salga mas barato, a la semana estarías gastando $35.00 y eso considerando que solo lo compras en días laborales, si eso lo multiplicas por las 4 semanas del mes serían $140.00 que estarías ahorrando, y podrás decir "Ay $140.00 no son nada" pero ponte a pensar, si además del "refresquito" diario le sumas los días que decidiste comer fuera de casa porque "por las prisas" no te dio tiempo de preparar en casa algo para desayunar, más los chicles para tener el aliento fresco regresando de comer a la oficina, más el café venti, más el "cigarrito" que fumas durante el break, más más más más. ¿Te das cuenta? Estos gastos hormiga, que en definitiva no traen beneficios a la salud, representan un gasto innecesario pero sobre todo con ese dinero podrías comprar alimentos de mejor calidad.
2. Evita comprar alimentos por tendencia: algunas veces y con el afán tener en a la moda nuestra alacena, caemos en el juego de comprar cosas que no son del todo necesarias como las nuevas semillas "X" con un "poderoso poder antioxidante" o la bebida energética que además te dará "el shot de vitaminas que necesitas al día" o el queso "libre de lactosa y con 0.001% de grasa". Todos estos son ejemplos burdos, pero realmente llegamos a caer en el consumo por la buena mercadotecnia que hay detrás, así que no te dejes llevar tan fácil. Un comprador informado es un consumidor responsable.
3. Evita hacer las compras con hambre: Ya sea que vayas al super o al mercado, evita a toda costa hacer tus compras sin una planificación de lo que vas a comer en el transcurso de la semana, quincena o mes (Como sea que anticipes tus compras) pero sobre todo evita ir con hambre. Verás, es muy común comprar alimentos por antojo que realmente por necesidad, y no es que esté mal llevar el antojito de vez en cuando, pero si esto ya es parte de un modo de vida entonces ¡Alerta!
4. Busca el equilibrio en tu plato: Sí, ya sabemos que debemos consumir frutas y verduras día a día, pero las cantidades son muy importantes. Basándonos en el plato del buen comer, que por cierto es una guía básica y orientativa. Podremos notar que la imagen asemeja el cómo se debe ver mi plato a la hora de sentarme a comer. Y es aquí donde implicará un ahorro importante, ya que la mitad del plato está constituida por frutas y verduras, las cuales además de ser muy económicas y más si se trata de las de temporada, son una excelente fuente de energía, vitaminas, fibra y minerales los cuales necesitamos para gozar de buena salud. 1/4 parte del plato debe ser de cereales puede ser pasta, arroz, tortilla e incluso bolillo, estos ademas de ser cereales de un bajo costo, nos van a aportar fibra, ácido fólico y vitaminas del complejo B. En la última cuarta parte del plato se encuentra la proteína, es decir todos los alimentos de origen animal; pollo, pescado, cerdo, etc. Y no, no se necesita comer salmón todos los días para estar saludables, existen alternativas muy asequibles para todos los bolsillos, en los más económicos encontramos el cerdo y el pollo que son proteínas de alto valor nutrimental. Pero si de plano ni con esas porciones, tu economía no da para comprar carne, no te preocupes ya que combinar un cereal (arroz, pasta, tortilla, bolillo, etc) con una leguminosa (habas, lentejas, garbanzos, frijoles, etc) da como resultado una proteína de alto valor muy similar a la de la carne.
5. No necesitas consumir azúcar: Sí, es cierto que el principal alimento del cuerpo es la glucosa, esto se debe a que nos aporta energía, sin embargo no necesitas consumirla en forma de azúcar ya que la puedes encontrar de forma natural en las frutas. El azúcar de mesa, llámese "miel de abeja, azúcar blanca, morena, de mascabado, refinada, etc" solo aporta calorías, la única variante entre ellas es la cantidad de fibra que ofrece mientras que la fruta, aporta azúcar en forma de fructosa además de fibra, vitaminas, minerales y hasta agua. Hemos acostumbrado el paladar al sabor dulce en nuestros alimentos y bebidas, y dejarlo no siempre es fácil, así que puedes ayudarte en la transición de bajarle al azúcar de endulzantes no calóricos. Bajarle al azúcar de mesa implica también un ahorro.
6. Prepara tus alimentos en casa: Independientemente del tema de higiene y seguridad en la preparación, también implica un ahorro significativo tanto económico como de calorías, ya que por muy barata que sea la fonda (que es el lugar más frecuente de consumo fuera de casa) siempre será más costoso que llevarte tus alimentos desde casa. Resaltemos que al final del día la fonda es un negocio que necesita ahorrar en la medida de lo posible, y esto puede ser, desde comprar alimentos de baja calidad, re utilizar alimentos o ingredientes que no se terminaron, reciclar el aceite y servir lo mismo (nutrimentalmente hablando) para saciar a sus comensales y sí, me refiero a los primeros tiempos de comida en los que es muy común servir arroz más pasta, más tortillas. Pero no quedan de lado las aguas y los postres, porque si bien nos va, pueden ofrecernos agua de frutas naturales y fruta fresca de postre, pero si no, se ofrece refresco, agua con saborizantes artificiales y un postre por de más azucarado. Sí es más fácil acudir al puesto, a la fonda, al restaurante y quizás hasta más rico, sin embargo comer de forma saludable solo implica planeación y organización.
Te invito a llevar un mejor estilo de vida, adoptando hábitos que mejoren tu salud.
No dejes para mañana lo que puedes empezar hoy.
Yo soy Narshelli Lozano, tu nutrióloga de cabecera y nos leemos en el siguiente post con más información para cuidar tu salud.
Comentarios
Publicar un comentario